Otra clave que también ha dado muy buenos resultados para salir en cuerpo astral es la del DISCERNIMIENTO.
Durante el día va usted por la calle, por ejemplo, y de pronto se encuentra con un amigo que hacía muchos años no veía. Hermano, debe hacer allí mismo la reflexión...¿Será que estoy en Astral?.... ¿Será que estoy en el físico?...¿Andaré fuera de mi cuerpo? Dé un saltito con la intención de flotar. Es claro que si flota es porque está en cuerpo astral.
Que tal si va usted, por ejemplo, por la calle y de pronto se encuentra usted con un amigo que murió de 20 a 30 años atrás. Le advierto que usted mismo se llame al orden, se pregunte a sí mismo: ¿Estaré en astral? Luego dar un saltito, si flota es porque está en cuerpo astral.
Si va usted por la calle, por ejemplo, y de pronto se encuentra usted con una multitud de gente, hermano, un poquito de reflexión.... ¿Cómo es posible que no aproveche la ocasión? Ningún trabajo le cuesta a usted preguntarse a sí mismo: ¿Qué hace usted en esa área? Enseguida haga el ensayo, dé el saltito con la intención de flotar, si flota es porque está en astral seguro.
Si usted, por ejemplo, de pronto ve una vitrina que hay en algún almacén... Hágase la pregunta a sí mismo… ¿Estaré en astral? Después que los estudiantes se han hecho la pregunta a sí mismos y al dar un saltito resultaba que estaban en astral, estaban realmente en cuerpo astral, pero andaban inconscientes, creyendo que estaban en carne y hueso.
De manera hermanos que hay que aprender a DISCERNIR, entiéndanlo bien, a DIS-CER-NIR.
En las horas del sueño normal, se vive en los mundos internos con la conciencia dormida. Allí, en los mundos internos, nosotros los HERMANOS MAYORES vemos a los carpinteros en cuerpo astral, en su carpintería, a los vendedores de productos mercantiles en sus almacenes, a los hombres de la rueda manejando sus carros o sus máquinas, etc., etc. Todos están completamente convencidos que están en carne y hueso.
Cuando uno le pregunta a algún amigo de esos... ¿En qué plano se encuentra? ¿Dónde cree que está usted amigo mío? Siempre le contestan a uno que están en carne y hueso. Si uno les dice que están en astral, nunca creen, siempre se burlan.
Si esas gentes despertaran la conciencia en los mundos internos, serían iniciados, serían iluminados, irían a los templos, se transformarían totalmente. Pero como a esta gente nunca se les ocurre hacer este ejercicio que estamos enseñando, viven siempre con la conciencia dormida.
Si tú haces esta práctica durante todo el día, a cada minuto, a cada segundo, en presencia de una persona que hacía mucho tiempo que no veías, en presencia de un objeto curioso, en presencia de una multitud de gente, etc., etc. Si hacéis la pregunta, es claro hermanos que este ejercicio se te graba muy bien en el subconsciente y el resultado es que por la noche resultáis haciéndote la pregunta en el plano astral y claro, al hacértela en el plano, pues entonces despertáis conciencia… ¿Entendido?
Es que lo que uno hace en el día se repite en la noche durante el sueño. Si tú te acostumbras a hacer este ejercicio durante el día, pues es claro que durante la noche resultas haciéndolo durante el sueño y al hacerlo durante el sueño, pues despiertas conciencia y al despertar conciencia, quedas iluminado. Entonces puedes visitar los templos de la Logia Blanca, entonces puedes invocar a los ángeles. (extraída de la conferencia “Proyección Astral”).
El alma se ocupa durante las horas del sueño en los mismos oficios y ocupaciones del día.
Fuera del cuerpo los comerciantes compran y venden en sus almacenes, sin darse cuenta de que están fuera del cuerpo.
Durante las horas del sueño vemos a las almas de las modistas, de los mecánicos, de los tenderos, de los vendedores ambulantes, etc., dedicados a los mismos oficios y menesteres del día.
Esas almas andan dormidas, convencidas, seguras de que se encuentran en carne y hueso. Cuando alguien les dice que están fuera del cuerpo, entonces no creen y se burlan.
Si esas almas se dieran cuenta de que están fuera del cuerpo, entonces podrían transportarse a cualquier rincón del mundo en pocos instantes.
Así la esposa que sufre por el hombre que ama y que está ausente; la novia que está sufriendo por su novio amado, puede visitarlo sin ser vista. La madre que tiene el hijo ausente puede visitar a su hijo, y darse cuenta de su vida.
Lo importante es conocer la clave, el secreto para darse cuenta de que está fuera del cuerpo físico.
Esa clave es la del discernimiento. Durante el día debemos hacernos esta pregunta: ¿Estaré en el cuerpo? ¿Estaré fuera del cuerpo?. Brinque usted entonces, dé un pequeño saltito con la intención de flotar en el espacio, y si flota es porque usted está fuera del cuerpo. Entonces suspendido en los espacios, diríjase a donde su corazón lo lleve.
Esta pregunta deberá hacérsela usted en presencia de cualquier cosa curiosa. Supongamos que va usted caminando por la calle y se encuentra con un amigo que hacía tiempo no veía, entonces hágase la pregunta: ¿Estaré en el cuerpo o fuera de él?. Dé un pequeño saltito con la intención de flotar, y si flota es porque su cuerpo está dormido en la cama y usted está fuera de él. Diríjase entonces a donde su corazón lo lleve, a donde el ser ausente, a donde el hijo lejano, a donde el ser amado.
Esta pregunta deberá usted hacérsela durante el día, en presencia de cualquier cosa curiosa. Un tumulto, un objeto raro, el encuentro con un fallecido, el encuentro con un amigo lejano, en fin, en presencia de cualquier detallito insignificante.
Esta clave del discernimiento se debe practicar durante el día, a cada paso, a cada instante, para que se grave bien en nuestra alma, y actúe durante el sueño.
Todo lo que uno hace durante el día lo hace también durante el sueño, y si durante el día se acostumbra a esta práctica, durante la noche resultará usted haciéndola en horas del sueño cuando su alma esté fuera del cuerpo.
Y entonces, al hacerse la pregunta, dará el saltito tal como lo ha hecho durante el día, y despertará su conciencia y flotará en los espacios y podrá visitar a los seres lejanos, al hijo ausente, a la madre de la cual no ha tenido noticias, etc.
El alma durante las horas del sueño, está fuera del cuerpo, lo importante es que el alma se de cuenta de que anda fuera del cuerpo para poder visitar cualquier sitio lejano.
Esta es la clave del discernimiento.
Si estando fuera del cuerpo, invocamos con puro corazón a la Virgen del Carmen, entonces la Divina Madre del Nazareno concurrirá a nuestro llamado y podremos conversar con ella. Y si estando fuera del cuerpo invocamos al Ángel Gabriel, pidiéndole la anunciación entonces él podrá decir a la esposa y al esposo, en que día y en que hora pueden juntar sus cuerpos. Y así las mujeres podrán concebir sus hijos por obra y gracia del Espíritu Santo. Es decir, por orden del Espíritu Santo.
Los hombres pueden conversar con los ángeles durante el sueño. Toda mujer, todo niño, todo anciano, puede conversar con los ángeles durante el sueño.
Fuera del cuerpo podemos invocar a los ángeles y estos concurren a nuestro llamado para enseñarnos la palabra de Dios.
Cap.5 del libro El Libro de la Virgen del Carmen.
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